La posibilidad de una alianza entre los partidos posconvergentes parece cada vez más lejana. El PDeCAT ha interpuesto una demanda judicial para recuperar la marca JxCAT y evitar así su utilización por el nuevo partido de Puigdemont. El PDeCAT alega una maniobra fraudulenta de los de Puigdemont para hacerse con las siglas.
Según ha avanzado el diario Ara, el juez ha convocado una vista para la semana que viene con el fin de decidir si toma medidas cautelares y suspende la posibilidad de que Puigdemont use las siglas y lance así definitivamente su propio partido bajo ese nombre.
Según fuentes de la dirección del PDeCAT, la demanda se presentó hace semanas y en ese momento se comunicó a Jordi Sànchez.
Una asamblea que no se celebró
El conflicto entre los dos partidos es la forma en como se ha hecho el cambio de nombre. Cuando se creó la marca JxCat en 2017 los titulares eran trabajadores del PDeCAT, con Laia Canet como presidenta y dos personas más del partido.
A principios del 2020, los próximos a Puigdemont llevaron al notario un documento en el que Canet renunciaba a las siglas, junto con una certificación que se había hecho una asamblea telemática para cambiar la dirección del partido. Pero, según defiende el PDeCAT en su demanda, esta asamblea telemática no se hizo.