La beligerancia nacionalista contra los catalanes que se expresan en castellano parece haber subido de intensidad en los últimos tiempos. Después de que la consejera de Cultura, Mariàngela Vilallonga, dijese que en el Parlament se «hablaba demasiado castellano» o que Plataforma per la Llengua haya orquestado una campaña contra la presunta «deriva castellanizadora» de TV3, esta vez el responsable de la reconvención lingüística ha sido una estrella televisiva: Jair Domínguez.
«El único debate, entiendo, es que si vives en Cataluña y no hablas catalán, o bien eres tontito, o bien mala persona», ha aseverado en su cuenta de Twitter el conductor junto a Toni Soler del programa Està Passant y colaborador de Catalunya Ràdio. El insulto ha sido aplaudido por la actual directora del Institut Ramon Llull y profesora de la Universitat Pompeu Fabra (UPF), Iolanda Batallé, que ha afirmado haberse «reído mucho» con la ocurrencia de Domínguez. Posteriormente, ha borrado este comentario, si bien usuarios como el activista antinacionalista Oriol Güell i Puig se han encargado de difundirlo a través de una captura de pantalla. El tuit también ha sido celebrado por el diario separatista El Nacional, que ha estimado que con él Domínguez «se parte la cara por el catalán».
Pidió que le lanzasen un «cubo de mierda» a Arrimadas
No es la primera vez que este presentador lanza invectivas de este calibre contra el constitucionalismo o, directamente, contra España. Son conocidos los improperios que ha dedicado a políticos no nacionalistas como Inés Arrimadas, de Ciudadanos, o Enric Millo, del Partido Popular. Así, de la primera instó a «que alguien le tire un cubo de mierda por la cabeza», mientras que al segundo no dudó en tildarlo de «gusano». Más recientemente, en febrero, en una entrevista en Vilaweb, se mostró a favor de que «pongan titadine en la mesa de diálogo» entre el Gobierno de Sánchez y el separatismo catalán.
Aunque, sin duda, uno de sus comentarios más cuestionables lo publicó en marzo de 2018 en su cuenta de Instagram. En aquella ocasión, el popular presentador desgranó la siguiente reflexión: «Habrá muertos y será terrible porque, en el fondo, no nos gusta la violencia. Pero nos han llevado al límite y ahora por fin hemos descubierto que la república no se construye con lacitos y manifiestos, sino con sangre y fuego». Pese a la crudeza de los comentarios precedentes, TV3 no ha contemplado prescindir de los servicios de Domínguez, como sí hizo, al menos temporalmente, con los del controvertido actor de Polònia Toni Albà.