Tres de agosto, salta la noticia: «Juan Carlos I, abandona España». Poco tarda la alcaldesa Ada Colau, en hiperactivar sus redes sociales para atacar al monarca. Al margen de su condición institucional como alcaldesa y los problemas que Barcelona tiene sobre la mesa debido a la inseguridad o la crisis económica derivada por el COVID-19. Colau saca su espíritu más activista para tratar uno de los temas que más polémicas le han generado desde que es alcaldesa, la Corona.
Un primer mensaje en Twitter para valorar la marcha del rey emérito, sin contemplar la presunción de inocencia, califica su marcha de «fraude a la democracia». Además, no duda en reclamar, con hashtag incluido, un referéndum sobre la monarquía.
«La corrupción debe someterse a juicio. Y el apoyo a la monarquía, a referéndum. Permitir la huida de Juan Carlos I supondría un fraude a la democracia y a toda la ciudadanía española. #ReferendumRepublicaYa».
El presidente del gobierno, Pedro Sánchez compareció en Moncloa para valorar la noticia, mostró «respeto» a la decisión de Juan Carlos I y valoró la «ejemplaridad» de Felipe VI. A la alcaldesa de Barcelona tampoco le entusiasmaron las palabras del presidente sobre la marcha del emérito. Un hecho que supuso un nuevo comentario en Twitter para criticar a Moncloa y nuevamente a la monarquía.
«¿En nombre de quién habla Moncloa? Dudo que sea por los miles de socialistas cuyas familias republicanas dieron la vida por la democracia (a diferencia de los borbones, que han vivido a costa de la democracia). Corrupción e impunidad son incompatibles con la ejemplaridad».
Hoy mismo, la alcaldesa continuaba en redes sociales con sus reproches a Sánchez, pidiendo explicaciones. «Tengo mucho, mucho interés en saber qué va a decir el Presidente Sánchez hoy en su comparecencia: ¿acordó o no con la Casa Real la huida del emérito, presunto corrupto? En política, como en la vida en general, cada uno debe asumir sus actos y responder por ellos».
Tras la comparecencia de Sánchez en la Moncloa, Colau seguía: «Decepción es poco. Vergüenza ajena e indignación. Un ex jefe de estado presuntamente corrupto ha huido del país y el presidente se limita a decir que qué bien que se ha ido y que las conversaciones son confidenciales. Vergüenza. La gente pasando hambre y el emérito de retiro dorado».
Ahora tocará ver si estas palabras y reproches pueden afectar de algún modo a la relación con el presidente del Grupo municipal socialista, Jaume Collboni, socio de gobierno en el Ayuntamiento de Barcelona.
La guerra de Colau contra los Borbones
En julio de 2015, pocos días después de la llegada de Ada Colau a la alcaldía del Ayuntamiento de Barcelona, una de sus primeras medidas fue retirar el busto del Rey Juan Carlos I del salón de plenos del consistorio. Después de cinco años y con una sentencia judicial que obliga a restaurar la imagen del actual monarca. Colau sigue sin cumplir con la ley y la imagen de Felipe VI brilla por su ausencia.
La particular guerra de Colau con la corona empezó con este primer gesto de retirada del busto, pero luego se sumó el cambio de nombres de calles de la ciudad para ‘desborbonizar’ el nomenclátor. Primero, sustituyó la Plaza Juan Carlos I por ‘Cinc d’oros’ y después la avenida Príncipe de Asturias por ‘Riera de Cassoles’.
Entre las últimas polémicas, destacan «los plantones» de la alcaldesa al rey Felipe VI en actos oficiales como: el besamanos con motivo del Mobile World Congress (MWC) o en la inauguración del Salón el Automóvil de Barcelona. Un gesto que se ha hecho más evidente los dos últimos años, debido a que el saludo de la alcaldesa al Jefe del Estado captaba el interés de la prensa que buscaban la «incómoda foto».