El presupuesto de la Generalitat de Cataluña asciende en 2020 a 46.057 millones de euros. Supone el 18,2 % del PIB catalán. Los gastos de la Generalitat han sido muy expansivos en tanto que fue acumulando y usurpando competencias.
El gobierno de la Generalitat fue sistemáticamente más allá de sus competencias propias, amplió sus cometidos y creó aquello que, en la fase preparatoria de su golpe de 2017 contra el Estado español, los separatistas llamaron estructures d’Estat. Bien, hasta que los líderes separatistas no lo expliquen en sede judicial, supondremos que los gastos en concepto de estructures d’Estat son algo así como el lugar de encuentro del pesebre presupuestario con la revolución.
Figura 1 Presupuesto anual de la Generalitat de Cataluña
De esta suerte, en los presupuestos de la Generalitat será muy difícil distinguir el polvo de la paja. En ellos hay malversación legal (como es financiar referéndums ilegales, el bombardeo de propaganda, las performances, entes como Diplocat y encargos y subvenciones a Independent Diplomat, así como las demás acciones y estructuras fuera de competencias y fuera de la ley). Y en los presupuestos de la Generalitat impera la malversación real, como son las jugosas subvenciones a todo chiringuito independentista, y el despilfarro.
En España el gasto público está altamente descentralizado (49,2 % del total lo realizan las regiones). Mientras, los ingresos recaudados por las Comunidades Autónomas son el 14,7% del total, proporción semejante a la de los sistemas federales. Por tanto: ¡yo gasto y tú recaudas! De este modo, con el dinero de Madrit se han pagado legal e ilegalmente los desfiles, fiestas, ensoñaciones y rebeliones. Sabido es que nunca el dinero del pérfido enemigo es suficiente para financiar al pueblo que corea a los buenos dirigentes nacionalistas, más aún si sus diputados en el Congreso son necesarios para formar el gobierno de España.
Los presupuestos de la Generalitat se han multiplicado por 3,7 veces entre 2000 y 2020 (ver Figura 1). Y ello a competencias iguales, sin que las competencias legales aumentaran en estas dos décadas, y a pesar de la crisis económico-financiera-fiscal de 2008-2013.
En los presupuestos de la Generalitat impera la malversación real, como son las jugosas subvenciones a todo chiringuito independentista
En cuanto a los ingresos del presupuesto para 2020, los principales son el tramo autonómico del impuesto estatal sobre el IRPF (11.587 M €), la participación en el impuesto estatal sobre el IVA (7.705 €), los impuestos propios (2.617 M €) y la deuda (10.219 M €, contraída con el Fondo de Liquidez Autonómico, del Ministerio de Hacienda de España).
En cuanto a los gastos del presupuesto de la Generalitat para 2020, los principales son los sueldos de funcionarios propios y de entidades, consorcios, fundaciones y empresas propias (12.816 M €), la transferencia al Servei Català de la Salut (9.548 M €), las transferencias a entidades, consorcios, fundaciones y empresas propias (unos 11 mil M €) y la amortización de la deuda (10.443 M €). Considerados por funciones, los principales gastos del presupuesto de la Generalitat para 2020 son los de sanidad (12.501 M €) enseñanza (6.698 M €), entes locales (3.725 M €) y Mossos d’Esquadra (1.226 M €).
Las dinámicas del gasto de la Generalitat en enseñanza y en sanidad son semejantes: alcanzaron su máximo en 2008, cayeron hasta 2014, luego se recuperaron muy poco, para volver a caer en 2020 (ver la Figura 2). El carácter anti-social de los gobiernos separatistas de la Generalitat es dramático y desvergonzado. Así se constata en los logros en enseñanza del régimen separatista catalán:
- El fracaso escolar de los alumnos castellanohablantes de Cataluña es del 30,0% y del 17,5 % el de los catalanohablantes.
- En Andalucía el fracaso escolar es del 19,4 % y en Madrid del 9,4%. Por consiguiente, en las madrassas de la Generalitat incluso los alumnos catalanohablantes fracasan el doble que los alumnos de Madrid.
Figura 2 Reducción del presupuesto de la Generalitat de Cataluña en Sanidad y Enseñanza y expansión de los otros gastos
Mismamente ocurre en Sanidad. Siendo la Sanidad el ítem principal de gasto de la Generalitat, sobre ella se lanzaron las avispadas abejas de la corrupción. ¿Qué ‘sistema sanitario nacional’ de una de las 17+2 Comunidades Autónomas registra los peores resultados? (Ver la Figura 3.) Angustia. Desesperación. Bochorno. Cataluña, por supuesto. Si la Generalitat quisiera ser normal, podría salvar muchas vidas y ahorrar muchas vidas fracasadas.
En el contexto de rebelión permanente de la Generalitat contra el Estado español, naturalmente, también ha florecido la creatividad presupuestaria. Serán de aplicación al presupuesto de gastos y al presupuesto de ingresos de la Generalitat todo género de artificios y subterfugios para ampliarlos, aun careciendo de financiación. Amén de tergiversaciones como los “déficits de financiación” y de invenciones sobre una “deuda histórica”: para los separatistas, todo, todo vale para avivar solo sea por un tiempo la furia de las masas y acosar así al Estado español.
De acuerdo con todo lo anterior, se desencadenaron las dos consecuencias de la ingeniería fiscal-financiera: el déficit (los gastos totales superan a los ingresos corrientes) y la deuda (emitida para financiar el déficit). Entonces ¡ancha es Castilla!
Figura 3Listas de espera en los 17+2 sistemas sanitarios autonómicos
Figura 4 Deuda acumulada de la Generalitat de Cataluña
Figura 5 Presupuesto anual y deuda acumulada de la Generalitat
Habida cuenta del ciclo presupuestario y de la diversidad de presupuestos (proyecto, inicial aprobado, ejecutado, liquidado) y, especialmente, dada la alta creatividad presupuestaria característica de una administración rebelde como la Generalitat (que lleva a que el déficit final del presupuesto ejecutado sea siempre muy superior al déficit inicial aprobado), renunciamos a considerar los déficits (siendo así que la información relativa a ellos es de nula fiabilidad) y nos centramos en el análisis de la deuda viva (que acumula los sucesivos déficits anuales finales reales), de acuerdo con los datos del Banco de España.
Entonces, se puede analizar la deuda propia de la Generalitat de Cataluña:
- En relación con el PIB
- Comparando sus importes: en 2000 la deuda de la Generalitat representó el 8,3% del PIB de Cataluña, en 2020 representó el 33,7 %. Claro, en un hipotético escenario de secesión de Cataluña del resto de España, a este importe de la deuda propia de la Generalitat, debería añadirse la cuota parte de la deuda española, así como los demás importes de la factura de independencia. Entonces, la deuda de una hipotética Cataluña independiente superaría ampliamente el 175 % del PIB, esto es, un 75 % más que la del resto de España. Esto supone una anualidad superior al 20 % del PIB, completamente imposible de financiar al carecer Cataluña de acceso a los mercados financieros. Desde otro punto de vista, una hipotética independencia de Cataluña aligeraría en mucho los costes financieros de España.
- Comparando sus crecimientos: la deuda de la Generalitat creció tres veces más que el PIB de Cataluña.
- En relación con el presupuesto aprobado
- Comparando el volumen de la deuda con el volumen del presupuesto: en 2000 la deuda de la Generalitat representó el 81,5 % del presupuesto de la Generalitat; en 2020 representó el 187,9 % (ver la Figura 5). Hay un extraordinario crecimiento de la deuda acumulada.
- En relación con la deuda de otras Comunidades Autónomas
- Comparando la deuda de la Generalitat con la de la Comunidad de Madrid: en el año 2000 la deuda de la Generalitat era 2,5 veces superior a la deuda de la Madrid; en 2020 era 2,3 veces superior. El endeudamiento de la Generalitat siguió duplicando al de Madrid.
- Comparando la deuda de la Generalitat con la deuda de todas las CC.AA.: en 2000 la deuda de la Generalitat representaba el 26,5 % de deuda de todas las CC.AA.; en 2020 representaba el 26,6 %. Los valores de la Generalitat se mantienen en una proporción bastante superior a la de su población o PIB.
Conclusiones
- Entre los años 2000 y 2020 el presupuesto de la Generalitat se multiplicó por 3,7 veces. La deuda creció a una media anual del 10,8 %. La Generalitat es una máquina de gastar y de acumular deuda sin tasa. Paga y pagará Madrit.
- La deuda de la Generalitat es el 26,6 % de la deuda total de las CC.AA., proporción a comparar con las de su PIB y población.
- El expansionismo, creatividad, indisciplina y rebeldía presupuestarias y financieras de la Generalitat generaron unos presupuestos, déficits y deuda de la Generalitat insostenibles, con ratios de iliquidez e insolvencia que condujeron a su quiebra y a su rescate por el Estado español.