La Lliga Democràtica ha elaborado un decálogo con su posicionamiento político en el que destaca la omisión a cualquier referencia a una consulta independentista y la defensa de un federalismo pluranacional, un ejercicio leal del autogobierno, un catalanismo integrador y cosmopolita, una financiación justa y un compromiso con la gobernanza de Cataluña y España.
En su decálogo resalta también su apuesta por una sociedad segura y su defensa de la propiedad privada y de la familia como pilar de la sociedad, proponiendo una Ley integral de la Familia que, entre otros objetivos, ayude a la natalidad.
Otras cuestiones contempladas son la transición ecológica, el empleo de calidad, la inversión en salud, educación y vivienda asequible, así como la transparencia de la admiistración, la tolerancia cero con la corrupción y la colaboración público-privada.
La Presidenta de la LLiga Democràrica, Astrid Barrio, ha señalado a preguntas de este medio que La LLiga apuesta inequivocamente por la confluencia electoral de todo el catalanismo en un programa a cuatro años que priorice la gestión de la reconstrucción y la reconciliación, aparcando diferencias estrátegicas a más largo plazo. En todo caso considera necesario que las opciones de centro se fortalezcan en la próxima legislatura para favorecer los máximos consensos en una etapa que, sin duda, presenta grandes retos económicos y sanitarios y que sólo pueden afrontarse desde la máxima colaboración entre las diferentes fuerzas políticas y una focalización total del próximo gobierno catalán en una gestión eficaz y eficiente.