El ex presidente fugado de la Justicia española y eurodiputado Carles Puigdemont no va a tener fácil su proyecto de hacer desaparecer al PDECat, partido del que es militante. El objetivo de Puigdemont es diluir esta formación en el seno de la Crida per la República, JxCat o cualquier otra formación con la que el independentismo de derechas decida concurrir a las próximas elecciones autonómicas. Pero la dirección del PDECat no está dispuesta a someterse a los deseos de su militante más poderoso y este martes lo ha demostrado con la presentación de un manifiesto rubricado por más de 130 alcaldes defendiendo la necesidad de que el PDECat se mantenga en activo.
En el documento, los ediles exigen «huir del pensamiento único» en la reordenación del espacio independentista conservador y defienden que el PDECat no puede dejar de existir. El texto choca con el presentado el pasado sábado por otros cargos electos y votantes de JxCat en el que, bajo el título de Junts y con más de 2.000 adhesiones, urgen a impulsar «sin más demora» la «ordenación» del espacio político de la formación.
El manifiesto, que sigue abierto a los que lo quieran firmar, pide reconfigurar un espacio en el que, además de «huir del pensamiento único», destaquen valores como el de la buena gestión, entre otras cuestiones.
Construcción y reivindicación nacionales
«Un proyecto político como este, como lo que representamos, no se puede diluir y aún menos dejar de existir«, reza el texto, que la dirección del partido no ha promovido, según han informado fuentes de la formación a Europa Press.
También reivindican que forman parte de una tradición política que siempre ha acogido y ha buscado contar con personas diversas: «Para sumar siempre estaremos, pero desde el reconocimiento de los sumandos. Reivindicamos la construcción nacional efectiva y haber movido la centralidad del catalanismo hacia el independentismo dejándolo en el sector mayoritario de la sociedad catalana».
Además, se definen como herederos de un proyecto político que tiene en su ADN la «reivindicación nacional«; la defensa de la economía productiva; el modelo de escuela catalana; la defensa del mundo rural; el reequilibrio territorial; la defensa de los trabajadores y autónomos; la industria; el modelo sanitario; los derechos individuales y colectivos, y la cultura del trabajo.
Alcaldes y miembros de la dirección
Entre los alcaldes que firman el manifiesto se encuentran el de Igualada, Marc Castells; el de Mollerussa, Marc Solsona; el de Martorell, Xavier Fonollosa, y la alcaldesa de Calella, Montserrat Candini, todos ellos miembros de la dirección del partido que preside David Bonvehí.
También son miembros de la dirección y firman el texto el presidente de la Associació Catalana de Municipis (ACM) y alcalde de Deltebre (Tarragona), Lluís Soler, y el de Puigcerdà (Girona), Albert Piñeira.
Otros alcaldes del PDeCAT que avalan el manifiesto son el de Reus, Carles Pellicer; el de Vilafranca del Penedès, Pere Regull; la alcaldesa de Tortosa, Meritxell Roigé; el alcalde de Gandesa, Carles Luz; el de Salou, Pere Granados; el de Vila-Seca, Pere Segura, y el de Lloret de Mar, Jaume Dulsat.
El alcalde de Premià de Mar (Barcelona), Miquel Àngel Méndez, también apoya a la dirección del PDeCAT, así como el alcalde de Portbou (Girona), Xavier Barranco, y el alcalde de Rosselló (Lleida), Josep Abad.