La economía catalana registró una caída del 4,9% en el primer trimestre de este 2020 en comparación con el mismo periodo del año pasado debido, principalmente, a la aportación negativa de la demanda interna (-4,8%), a la vez que las exportaciones han retrocedido un 6,4%, según datos del Idescat.
La evolución de la economía catalana en los primeros tres meses del año sitúa el crecimiento del PIB una décima por debajo de la media española, que según los datos avanzados retrocedió un 4,1%, y siete décimas inferior a la de la UE-27, que se sitúa en un (-3,5%).
En cuanto a la evolución intertrimestral, el PIB de Cataluña también muestra una caída del 4,9%, tres décimas por encima de la tasa española (-5,2%) y muy por debajo de la media registrada por la UE-27 (-2,7%).
Retroceso de las exportaciones
El retroceso de un 4,8% de la demanda interna se explica por la caída del consumo de los hogares (-7,5%) debido a la paralización de la actividad no esencial durante el estado de alarma por coronavirus, si bien el consumo de las administraciones públicas creció un 5,1%, principalmente por gastos de personal y la compra de bienes y servicios del Servei Català de la Salut y del Institut Català de la Salut, que han repuntado un 28%.
El retroceso de las exportaciones (-6,4%) se debe a la reducción de las exportaciones de bienes y servicios (-3,8%) por el parón de la actividad industrial y del comercio mundial.
El consumo de los extranjeros en Cataluña ha caído un 19% y la evolución del gasto declarado de los turistas extranjeros hasta febrero ya era negativa, a lo que se ha sumado el impacto negativo de la suspensión de la actividad turística a partir de la segunda quincena de marzo.
Importaciones
En cuanto a las importaciones, han caído un 7,6% a causa del retroceso de las importaciones de bienes y servicios (-7,7%) y del consumo de los residentes en el extranjero (-7,3%).
Todos los sectores económicos muestran una caída generalizada de su actividad, siendo la construcción el que presenta un descenso más pronunciado, del 7,7%, mientras que los servicios muestran una reducción del 4,3% debido al comercio, el transporte y la hostelería (-9,6%).
Por su parte, la industria muestra un descenso del 2,4% por sexto trimestre consecutivo, y el sector agrario presenta un crecimiento negativo del 2,2%.