Los problemas de Nissan afectan a todo el grupo Renault. La japonesa, cuya fábrica de Barcelona pende de un hilo tras el desplome de la producción de su modelo eNV200, ha registrado una caída del beneficio del 87,6%.
El grupo nipón solo ha contribuido con 242 millones de euros a las cuentas del pasado ejercicio de Renault, que ha entrado en pérdidas por primera vez desde 2009. En 2018, Nissan cosechó para la alianza con la francesa más de 1.500 millones de euros de beneficio
La francesa ha registrado unas pérdidas de 141 millones de euros, frente al beneficio de 3.302 millones de 2018. Según los números dados a conocer este viernes, Nissan ha sido la empresa con mayor caída de beneficio dentro del grupo, además de la caída en Daimler.
Caída de matriculaciones en Renault
Otras de las causas de estos números rojos se deben también a la caída de la actividad automovilística y a la aplicación de activos fiscales diferidos en Francia. Según las cifras, las ventas de Renault han descendido un 3,3%, hasta los 55.530 millones, y ha matriculado 3,75 millones de vehículos.
El grupo afronta ahora los efectos del coronavirus, que ha obligado a cerrar su fábrica en Wuhan, el epicentro de la pandemia. También ha suspendido las operaciones durante al menos cuatro días en su filial surcoreana en Busan debido a problemas en la cadena de suministro.
Renault ha reducido también sus objetivos sobre el margen operativo de este año, decisivo para llevar a cabo su reestructuración y su alianza con la automovilística japonesa.
Peores resultados de Nissan
Nissan, por su parte, ha informado de un impacto negativo sobre sus operaciones entre abril y diciembre del año pasado vinculado con la desaceleración de la industria y por las menores matriculaciones contabilizadas.
«Lamento decir que los resultados son peores de lo esperado«, ha admitido el máximo directivo de Nissan Motor, Makoto Uchida. Nissan ha registrado en su año fiscal un descenso del 8,1% en ventas globales, hasta 3,7 millones de vehículos.